CIENCIA Y ARTE
Después de un tiempo de silencio sin ninguna publicación en el blog, toca ya refrescarlo con la primera tarea interesante que nos encarga Margarita Lorenzo de Reizabal en el módulo de Arte y Ciencia del Máster de Cultura Científica.
Nuestra profesora nos pide una entrada asociada a la visualización de un par de vídeos:
· Un vídeo divulgativo sobre la fisiología de la audición
· Un interesante, y en cierto modo inquietante vídeo sobre la “verdad” de lo que oímos
Todo ello para reflexionar sobre lo que sin duda nos hemos preguntado cientos de veces o sobre lo que hemos discutido/argumentado otros cientos con nuestros amigos/familia/pareja: “¡¡me oyes pero no me escuchas!!”.
Pues bien ahí va mi reflexión:
En una situación normal, Oír lo aplicamos sin problema al propio sentido, a la capacidad fisiológica de recepción/percepción de una vibración del aire captada por nuestro pabellón auricular, que entra por el conducto auditivo externo hasta la membrana timpánica, donde mediante cambios de presión se moviliza seguidamente la cadena de huesecillos, éstos hacen vibrar el líquido contenido en las espirales de la cóclea, que traduce las vibraciones en liberación de neurotransmisores, quienes despolarizan las células auditivas enviando señales a las neuronas del nervio auditivo, quien a su vez traslada toda la información a través del tálamo a la corteza cerebral ¡¡y ya está!!: algo hemos oído. Esas vibraciones del aire que nos rodea, en diferentes frecuencias, transitan por un camino mecánico-químico hasta el cerebro y oímos. En definitiva, oír es un proceso fisiológico involuntario que sucede si el sentido el oído está neuro-anatómicamente sano.
Por otro lado, escuchar es todo lo que viene después de oír. Cómo interpretamos lo que hemos oído, qué sensaciones nos causa, qué conexiones con otras partes del cerebro se inician a partir de aquí para que lo que hemos oído genere una respuesta emocional o física: placer, miedo, conversación, huida, etc. Considerar que estamos escuchando implica procesar el mensaje y dar una respuesta al mismo. Escuchar, es un acto voluntario que precisa de nuestra atención y nuestra intención. Es posible entrenar la escucha para reconocer los sonidos de diferente modo, algunos nos emocionan otros no, algunos nos agradan otros no y todo ello depende no tanto del órgano receptor como de las interacciones neuronales en diferentes partes de nuestro cerebro. Podemos decir también que escuchar está íntimamente relacionado con otros sentidos que enriquecen el mensaje. Así por ejemplo, lo que vemos cuando oímos un sonido determinado sin duda modifica lo que escuchamos
Creo que es posible afirmar que oímos los ruidos inesperados que nos sorprenden o para los que no estamos preparados pero escuchamos los sonidos que buscamos y para los que activamos de forma consciente no solo nuestro sentido (aguzamos el oído) sino también nuestra mente (prestamos atención consciente)
Desde otra perspectiva, si nos referimos a la interacción emocional con otras personas escuchar es el primer paso consciente para comunicarnos. Escuchar es parte del proceso comunicativo, es entender, comprender y dar sentido a lo que se oye. Si llevamos la comunicación a las últimas consecuencias y escuchamos de manera activa, el acto de escucha genera empatía con respecto a las personas que nos hablan.
En definitiva, oír es una circunstancia, un hecho innato y escuchar es una búsqueda, un aprendizaje interpretativo.
Como despedida en este comienzo de año, desearos a quienes leáis esta entrada que los ruidos que oímos en 2020 se puedan convertir melodías que escuchamos en 2021!!
Hola Josu! Bienvenido a Ciencia y Artes.
ErantzunEzabatuTu primera entrada de blog está bien redactada y estructurada. El contenido aborda los dos tópicos, oir y escuchar, desde la divulgación científica, pero, al mismo tiempo, con un lenguaje cercano. Se lee con facilidad. También se agradece tu último párrafo: convierte tu aportación en algo personalizado, no uniformado...Muy apropiada la referencia sonora, además.
Consejo para próximas reflexiones: puedes apoyarte en opiniones expertas (citando referencia)y, además, se agradece mucho la inclusión de alguna imagen que ilustre el tema de manera sugerente (también referenciada la imagen si no es publica).
Buen trabajo! Ya tienes tu primer punto!